… DE LOS DOS, UNO PERDIÓ …

Y las campanas lloraron
Todas en el mundo entero,
Ahogando su tristeza
Muy fuerte se abrazaron,
Eran dos iglesias del alma
Que vacías se quedaron
Pues ya nunca replicaron
Los cánticos del amor,
En esta tarde de llanto
.. de los dos, uno perdió ..
Los cielos estaban rojos,
En todas las partes del mundo,
No se si era lluvia de sangre
O el llanto moribundo
Que brotaban de unos ojos
Como si fuera el vino
Convertido en vinagre
De una iglesia triste
Que muy sola quedó,
En los gemidos de la tarde
.. de los dos, uno perdió ..
Cada domingo en el mundo,
De la mañana a las seis
La gente va muy de prisa
A elevar su oración,
En los cánticos de un misa
De un amor que ya murió,
Pasaron los feligreses
Ni campanas ni sacerdotes,
Ni hostias, vinos, ni bancas
Vaya cruel desolación,
En los vacíos del alma.. de los dos, uno perdió ..

De lluvia era un día,
En los inviernos del alma
Lentos pasos enrumbé
A la iglesia vacía,
Como lloraba mi alma
Cuando en la puerta escuché
De una persona su llanto
Con canas, sin su encanto
Implorando al señor
Que a su hijo no lo prive
De un verdadero amor,
Porque en la soledad del alma
.. de los dos, uno perdió ..
Me escondí detrás de la puerta
Y salía muy de prisa
Secando con su pañuelo
Lágrimas del alma muerta,
Ya sus pasos van cansados
No tanto por la edad,
Sinó por la triste pena
Que nos da la soledad,
Llega a su pequeño rancho
Y un papel ella leyó,
No lo podía creer,
¡ .. fue muy tarde su oración .. !
se desplomó en la puerta
y en mis brazos se quedó,
en los inviernos del alma,
.. de los dos, uno perdió ..

Oscar Alvarado.
Chimbote 23-11-97
Hora: 9.45 am.